Una de las formas más fáciles de llenar los huecos de las puertas es utilizar burletes. Puede usar cinta adhesiva de espuma; silicona tubular, vinilo o caucho; almohadillas de esquina; rollos de fieltro o uno de los kits de burletes que se venden en las tiendas. Si ya hay burletes viejos en la puerta, quítelos y limpie el marco con alcohol isopropílico.